SixDegrees: la gran pionera olvidada de las redes sociales digitales

Botto Cayo > Ciberculturas > SixDegrees: la gran pionera olvidada de las redes sociales digitales

SixDegrees: la gran pionera olvidada de las redes sociales digitales

El presente artículo tiene como propósito analizar en profundidad el origen, auge y declive de SixDegrees, considerada la primera red social moderna que sentó las bases conceptuales y tecnológicas de este nuevo paradigma de interacción social virtual a finales de la década de 1990 (Boyd & Ellison, 2007). Se estudiará con detalle el contexto histórico que propició su surgimiento, las innovaciones disruptivas que introdujo, su explosivo crecimiento inicial, los desafíos que enfrentó, su fallida adquisición por Yahoo! y el trascendental legado que dejó en el posterior desarrollo de las plataformas de redes sociales online.

  1. Contexto histórico previo

Para comprender cabalmente el surgimiento de SixDegrees, es preciso repasar con cierta profundidad la evolución tanto de internet como de la World Wide Web durante las décadas previas, dado que varios hitos clave sentaron las bases tecnológicas e infraestructura necesarias para la creación de la primera red social moderna (Abbate, 2000).

Internet como concepto comenzó a gestarse en la década de 1960 a partir de un ambicioso proyecto de comunicaciones digitales de la agencia estadounidense ARPA (Advanced Research Projects Agency). El objetivo primordial era establecer una robusta red informática descentralizada para interconectar las computadoras de los principales centros de investigación, universidades y organismos militares del país, permitiendo así el libre intercambio de información entre estas entidades (Abbate, 2000).

Un hito fundacional fue en 1969 cuando se logró con éxito la primera conexión directa de computadoras entre la Universidad de California en Los Ángeles y el Instituto de Investigación de Stanford mediante el envío de un simple mensaje de prueba. A esta incipiente red se la denominó ARPANET, y marcó el inicio concreto de lo que hoy se conoce como internet.

Durante las décadas de 1970 y 1980, internet siguió expandiéndose de forma gradual, incorporando cada vez a más centros educativos, empresas tecnológicas y agencias gubernamentales. Si bien inicialmente su uso se limitaba a expertos en informática y ciencias de la computación, ya surgían los primeros servicios de correo electrónico, transferencia de archivos e intercambio de mensajes en tiempo real entre las entidades interconectadas (Abbate, 2000).

Recién a principios de los años 90 comenzaría una transformación profunda con la irrupción de la World Wide Web, desarrollada en 1989 por el brillante científico británico Tim Berners-Lee. La Web consistía en un revolucionario sistema hipertextual que facilitaba enormemente la navegación a través de documentos digitales interconectados mediante enlaces, permitiendo así saltar fácilmente de un sitio web a otro con solo un clic (Abbate, 2000).

En 1993 aparecía el primer navegador web con interfaz gráfica e imágenes denominado Mosaic, desarrollado en el Centro Nacional de Aplicaciones de Supercomputación (NCSA) de la Universidad de Illinois. Esta innovación sentaba las bases para la posterior expansión exponencial de la Web a escala global (Abbate, 2000).

La creciente popularización de internet y la Web entre los consumidores masivos durante la primera mitad de los años 90, propició asimismo la aparición de los primeros servicios incipientes que permitían ciertos niveles básicos de interacción social virtual, como los pioneer chat rooms, los foros web y los grupos de discusión electrónicos. Sin embargo, estas aplicaciones aún estaban muy fragmentadas y dispersas, sin una verdadera integración o conexión orgánica entre sí dentro de un mismo espacio social unificado.

Faltaba dar el salto disruptivo hacia una plataforma que lograra combinar perfiles personales, listas de contactos, potentes herramientas para explorar redes sociales, diversos espacios para la interacción grupal, todo ello integrado sin fisuras dentro de un mismo sitio. Es justamente en este contexto histórico que emerge SixDegrees a mediados de la década del 90 (Danah et al., 2007).

III. Andrew Weinreich y la visión detrás de SixDegrees

Uno de los primeros visionarios emprendedores en comprender y vislumbrar el extraordinario potencial que tendrían los sitios web para que las personas pudieran conectarse fluidamente entre sí y compartir todo tipo de contenidos multimedia, fue Andrew Weinreich, el fundador de SixDegrees (Boyd & Ellison, 2007).

Nacido en 1965 en Pittsburgh, Pensilvania, Weinreich se graduó en ciencias de la computación de la prestigiosa Universidad Cornell a mediados de la década de 1980. Luego trabajó algunos años como consultor en tecnologías de la información antes de incursionar a principios de los 90 en el entonces incipiente efervescente mundo de los emprendimientos de internet.

La idea seminal que dio origen a SixDegrees germinó durante una etapa clave, cuando Weinreich cursaba un MBA en la elitista Universidad de Stanford y leyó un artículo divulgativo sobre la fascinante teoría matemática y sociológica llamada “seis grados de separación” (Karinthy, 1929). Originalmente propuesta por el escritor húngaro Frigyes Karinthy en un célebre cuento de 1929, esta teoría postula que cualquiera puede potencialmente conectarse con cualquier otro desconocido en el planeta a través de una cadena de no más de seis vínculos o relaciones personales.

Inspirado profundamente por esta extraordinaria noción de una invisible urdimbre social de conexiones que vincula a extraños a través de intersecciones en las redes personales, Weinreich tuvo la genial intuición de explorar cómo crear un sitio web pionero que permitiera a los usuarios conectarse fluidamente entre sí y hacer tangible y concreta esa hasta entonces etérea y abstracta matriz de vínculos latentes (Boyd & Ellison, 2007). De esta forma nació su visión para construir y lanzar SixDegrees, concebida como una plataforma social disruptiva que transformaría la web en un vibrante medio para socializar.

  1. Obtención del financiamiento inicial

Una vez que articuló la idea y visión original para crear SixDegrees, el siguiente paso crucial que dio Weinreich fue obtener el capital semilla necesario para convertir dicho sueño en realidad (Danah et al., 2007). En una audaz e inédita jugada para la época, logró asegurar en 1997 la entonces astronómica cifra de USD$25 millones de parte de visionarios fondos de inversión de capital de riesgo, como Chase Capital Partners.

Esta munificencia constituía una apuesta sin precedentes para financiar a una empresa de internet totalmente nueva. Pero reflejaba la firme confianza que los inversores más innovadores depositaban en el enorme potencial de construir la primera gran red social online diseñada para audiencias masivas globales.

Gracias a estos fondos, Weinreich constituyó rápidamente la compañía SixDegrees en la ciudad de Nueva York y comenzó a trabajar intensamente durante 1997 en el desarrollo de la plataforma tecnológica, construyendo un equipo de talentosos programadores e ingenieros para dar vida a su inventiva visión.

  1. Lanzamiento en 1997 y características disruptivas

Luego de 10 meses de arduo trabajo para desarrollar la sofisticada infraestructura y las múltiples aplicaciones sociales, SixDegrees se encontraba finalmente listo para su histórico lanzamiento oficial, el cual tuvo lugar en mayo de 1997 ante gran expectativa de su fundador y los inversores, quienes aguardaban ansiosos la recepción que tendría esta novedosa clase de plataforma en la joven comunidad de internet (Danah et al., 2007).

El servicio demostró ser un éxito instantáneo, cumpliendo la promesa de su memorable eslogan: “SixDegrees te permite conectarte y enviar mensajes a tus amigos y familiares. Es gratis, confidencial y disponible desde cualquier parte. Únete a SixDegrees hoy mismo”. En efecto, los primeros usuarios quedaron gratamente sorprendidos al poder registrarse con facilidad, crear atractivos perfiles personales con multimedia, conectarse fluidamente con sus contactos para ir tejiendo una lista de amigos virtuales, interactuar en grupos afines a sus intereses y explorar visualmente las extensas redes sociales que emergían.

Uno de los factores decisivos que catapultaron rápidamente a SixDegrees como una plataforma social verdaderamente revolucionaria, fueron las múltiples características disruptivas que introducía, las cuales resultaban totalmente inéditas en el contexto de internet y la web de la época (Danah et al., 2007). Estas innovaciones sentaron varios precedentes clave que influenciarían profundamente el posterior diseño y desarrollo de sitios y aplicaciones de redes sociales.

Una de las funciones más innovadoras que se implementó por primera vez de forma mainstream en SixDegrees, fue darle a los usuarios la posibilidad de crear un perfil personal virtual donde podían publicar gran variedad de información personal, incluyendo datos demográficos como fecha de nacimiento y ubicación geográfica, gustos musicales, ideologías políticas, pasatiempos favoritos, creencias religiosas y otros aspectos reveladores de la identidad. Los miembros también podían subir sus propias fotografías y contenidos multimedia. Esto les permitía expresar su identidad de modos nunca antes posibles en el ciberespacio.

Otra gran innovación introducida por SixDegrees fue la habilidad de formar listas de contactos digitales, considerados “amigos” dentro de la lógica de esta nueva clase de plataforma social virtual. Los usuarios podían enviar invitaciones a otros miembros sugeridos por el sistema para conectarse entre sí, y así ir explorando hipertextualmente la creciente red de vínculos sociales. También se habilitaba la opción de visualizar gráficamente las cadenas de amigos en múltiples niveles. Esto posibilitaba examinar en profundidad los perfiles de los contactos directos, y a la vez los amigos de esos amigos. De esta forma se podía transitar e interactuar fluidamente dentro de toda la compleja trama de conexiones interpersonales que se tejían dinámicamente en torno a cada usuario, anticipando el concepto de lo que luego se conocería como “redes sociales virtuales”.

Asimismo, SixDegrees introdujo un novedoso sistema de control de privacidad, mediante el cual los usuarios podían determinar granularmente qué información de sus perfiles y actividades en la plataforma era pública, qué datos eran accesibles solo para sus contactos directos y qué contenidos estaban reservados para grupos específicos de amigos o uno mismo. Esta característica también era totalmente nueva para la época e inauguraba la posibilidad de gestionar activamente la visibilidad de los propios datos personales dentro del ecosistema de una red social en línea.

  1. Adopción masiva y competidores iniciales

Luego de su disruptivo debut en mayo de 1997, SixDegrees experimentó un ascenso de adopción exponencial y una expansión masiva sin precedentes para una plataforma de internet en general y para una red social en particular (Danah et al., 2007). Hacia fines de ese mismo año, la red ya contaba con cerca de 100.000 miembros pioneros. Pero la verdadera explosión ocurriría en 1998 y 1999.

Según registros e informes de la época, para fines de 1998 la titánica base de usuarios de SixDegrees rondaba ya el medio millón de personas. Pero sería durante 1999 que SixDegrees alcanzaría su clímax de popularidad, con un crecimiento viral impresionante que catapultó la membresía total de la plataforma a ubicarse entre 1 y 2 millones de usuarios activos a nivel mundial. Para una red social nacida apenas dos años antes, escalar a semejante volumen de adopción masiva global la convertía en un caso único y en un nuevo hito histórico que inauguraba la era de las redes sociales virtuales (Danah et al., 2007).

Diversos factores convergieron para impulsar la rápida adopción masiva de SixDegrees durante el intenso periodo 1998-1999:

  • La facilidad de uso de la plataforma y su interfaz intuitiva, que permitía a usuarios sin mayores conocimientos técnicos registrarse y comenzar a interactuar en pocos minutos.
  • La novedad y el entusiasmo ante esta forma disruptiva de socialización online, radicalmente diferente de las interacciones sociales fuera de línea.
  • El efecto viral derivado de enviar y aceptar invitaciones para conectarse e integrar a amigos, familiares y conocidos dentro de la propia red social personal en SixDegrees.
  • La sensación de exploración y descubrimiento dentro de las redes de contactos, algo muy atractivo para los miembros pioneros.
  • El deseo de expresión personal mediante la creación de un perfil con diversos tipos de información multimedia.
  • La posibilidad de crear nuevos vínculos pero también reforzar relaciones sociales ya existentes.

A pesar de su vertiginoso despegue, SixDegrees debió enfrentar rápidamente desde fines de los 90 el surgimiento de algunos nuevos sitios que empezaban a emular ciertas de sus innovadoras características sociales (Danah et al., 2007).

Uno de los primeros competidores en aparecer fue Classmates.com en 1995. Si bien no era estrictamente una red social genérica, esta plataforma permitía a usuarios registrados conectarse con antiguos compañeros de colegio o universidad. También incorporaba elementos como perfiles personales y directorios de usuarios organizados por institución educativa (Kirkpatrick, 2011).

Otro contendiente temprano más cercano fue Match.com, un popular portal de citas online que debutó en 1995 e incorporó posteriormente la opción de crear perfiles individuales con diversa información personal relevante para encontrar parejas compatibles (Kirkpatrick, 2011).

La irrupción de estas nuevas plataformas sociales evidenciaba el acelerado incremento en la demanda de los internautas de la época por participar en novedosas formas de interacciones sociales completamente mediadas por tecnologías digitales. Esto a su vez catalizaba el vertiginoso desarrollo de nuevos sitios competidores de SixDegrees, en una suerte de “carrera armamentista” tecnológica (Boyd & Ellison, 2007).

VII. Dificultades económicas y de monetización

Uno de los mayores y más complejos desafíos que debió encarar SixDegrees durante su explosivo crecimiento fue la notable falta de un modelo de negocios sólido y opciones viables de monetización que garantizaran la sustentabilidad económica y rentabilidad del servicio a largo plazo (Danah et al., 2007).

El enfoque temprano de su fundador Weinreich, típico de la era puntocom, se había concentrado en financiar la plataforma a través de rondas sucesivas de capital de riesgo, priorizando acelerar el crecimiento del número de usuarios a toda costa, mediante la oferta de un servicio 100% gratuito para los miembros. Pero conforme SixDegrees ganaba popularidad masiva, las serias deficiencias de esta estrategia cortoplacista comenzaron a quedar al descubierto (Danah et al., 2007).

Por un lado, si bien la publicidad dentro del sitio generaba algunos ingresos incipientes, las aún exiguas tarifas publicitarias en el naciente ecosistema web de la época estaban lejos de alcanzar para solventar los crecientes y onerosos costos operativos del servicio (Slee, 2022).

Por otro lado, los desesperados intentos de la compañía por monetizar su enorme base de usuarios ya cautivos, mediante el lanzamiento de funciones o membresías premium de pago, tropezaron con la fuerte resistencia de una comunidad fuertemente acostumbrada a beneficiarse de un servicio completamente gratuito sin restricciones (Danah et al., 2007).

Al depender enteramente de la inyección periódica de nuevas rondas de financiamiento externo por parte de inversionistas de riesgo, y sin fuentes predecibles de ingresos recurrentes sólidos, el meteórico crecimiento inicial de SixDegrees rápidamente comenzó a enfrentar severos cuellos de botella financieros, al no poder implementar un modelo comercial viable y escalable para la generación de ganancias sostenibles, aspecto crítico para la supervivencia de cualquier emprendimiento (Slee, 2022). Esta falla constituyó uno de sus mayores talones de Aquiles económicos.

VIII. Aparición de nuevos competidores

Simultáneamente a las crecientes dificultades para monetizar adecuadamente su plataforma y contenidos, otro golpe devastador que SixDegrees debió encarar fue la irrupción de nuevos sitios competidores entre 2000 y 2001, los cuales rápidamente comenzaron a ganar tracción e interés entre los internautas (Danah et al., 2007).

Entre estos ágiles nuevos contendientes se encontraban plataformas más jóvenes y técnicamente optimizadas como MySpace, Friendster y LinkedIn, las cuales estaban concebidas nativamente en el ecosistema web 2.0 que estaba surgiendo en ese momento. Haciendo uso de arquitecturas tecnológicas más modernas y modelos de negocios más innovadores, lograron cautivar la atención del público (Young, 2022).

MySpace por ejemplo, se lanzó en 2003 incorporando novedosas funcionalidades multimedia como perfiles ampliamente personalizables, aplicaciones virales, música y video streaming. Su diseño más intuitivo y moderno conectó rápidamente con millones de adolescentes y jóvenes. Para 2006 ya se había convertido en la red social número uno a nivel global, opacando velozmente a la otrora pionera SixDegrees (Kirkpatrick, 2011).

De forma similar, otras plataformas sociales más ágiles y centradas en nichos específicos fueron ganando mercado, mientras que SixDegrees quedaba progresivamente relegada al olvido y la irrelevancia, siendo incapaz de reinventarse y competir eficientemente con las redes emergentes que estaban absorbiendo y mejorando sus ideas originales (Boyd & Ellison, 2007).

  1. Fallida adquisición por parte de Yahoo!

Ante las crecientes dificultades para competir con las nuevas redes sociales más innovadoras tecnológicamente, y la persistente incapacidad para generar un modelo de negocios viable y escalable de forma sostenida, en enero de 1999 SixDegrees decidió aceptar una multimillonaria oferta de adquisición por parte del portal Yahoo! por USD$125 millones de dólares (Danah et al., 2007).

En el contexto de la época, esta operación corporativa constituía la segunda mayor transacción en la hasta entonces corta historia de internet, sólo superada por la colosal fusión AOL-TimeWarner poco tiempo antes (Kirkpatrick, 2011).

Si bien SixDegrees aún contaba con varios millones de usuarios fieles, su situación financiera y competitiva era ya insostenible de cara al implacable avance de las redes sociales de segunda generación. Por su parte, Yahoo! buscaba desesperadamente alguna vía rápida para penetrar en el fenómeno de las redes sociales virtuales, vislumbrando su explosivo potencial aún sin explotar (Slee, 2022).

Sin embargo, luego de la adquisición Yahoo! no pudo revertir la prolongada decadencia de SixDegrees. Los torpes intentos de la compañía por monetizar la plataforma inundándola de banners y publicidad intrusiva, solo aceleraron el éxodo masivo de usuarios hastiados hacia redes sociales más limpias y modernas. El ocaso de SixDegrees era ya imparable. Finalmente, en 2001 Yahoo! decidió cerrar para siempre la otrora gloriosa red social, apenas 4 años después de su mítico debut (Danah et al., 2007).

  1. Legado e influencia duradera

Aunque su existencia concreta fue fugaz, de apenas 4 intensos años que condensaron gran parte de la épica era puntocom, SixDegrees dejó un legado cultural y tecnológico extraordinario y duradero, inaugurando toda una nueva era en el campo emergente de la informática y las interacciones sociales mediadas por tecnologías digitales (Boyd & Ellison, 2007).

Entre los aportes más trascendentales de SixDegrees que aún perduran y se han vuelto convenciones ampliamente adoptadas, se puede mencionar la introducción misma del concepto de los perfiles personales virtuales y las listas de contactos o “amigos”, dos pilares fundamentales que actualmente integran el ADN de cualquier plataforma de redes sociales moderna (Kirkpatrick, 2011).

Asimismo, SixDegrees sentó precedentes cruciales e innovaciones tempranas al implementar por primera vez sistemas de gestión granular de la privacidad de la información personal compartida, los esquemas de navegación hipertextual por vastas redes de contactos, y una interfaz visual intuitiva y amigable para que cualquier usuario novato pudiera participar en estas nuevas ágoras digitales (Boyd & Ellison, 2007).

Otro legado cultural decisivo fue abrir las puertas para compartir vivencias personales y conectarse de forma sencilla online con conocidos y extraños de afinidades comunes. Conceptos que hoy nos resultan cotidianos, como blogs, microblogs, influencers y muchos otros derivan en parte de estos orígenes pioneros (Young, 2022).

En síntesis, a pesar de su corta existencia, SixDegrees demostró la viabilidad técnica y social de transferir las interacciones humanas a un nuevo espacio virtual tridimensional, allanando el camino para la posterior explosión de la Web 2.0 centrada en el usuario. Por todas estas razones, su influencia histórica en sentar las bases conceptuales y tecnológicas de las modernas redes sociales digitales resulta invaluable e innegable (Boyd & Ellison, 2007).

  1. Análisis de los factores de éxito y fracaso

Resulta instructivo hacer un análisis más profundo de los múltiples factores que impulsaron inicialmente el notable éxito y la adopción masiva de SixDegrees, así como también aquellos elementos que luego determinaron su abruptamente declive y desaparición.

Entre los principales factores que explican la explosión inicial de popularidad de SixDegrees se pueden mencionar:

  • Su llegada oportuna en 1997 aprovechando el boom de internet y las primeras ansias de los usuarios por socializar online (Boyd & Ellison, 2007).
  • La novedad y originalidad de su concepto de red social virtual integrada (Slee, 2022).
  • Su interfaz intuitiva y fácil de usar que permitía conectarse fluidamente (Young, 2022).
  • Las innovadoras funciones para crear perfiles y conectarse con otros usuarios (Kirkpatrick, 2011).
  • El efectivo boca a boca y viralización propia de los servicios sociales (Boyd & Ellison, 2007).
  • El atractivo de explorar las redes de amigos de amigos (Danah et al., 2007).
  • La sensación de formar parte de una comunidad virtual (Slee, 2022).

Sin embargo, varios problemas estratégicos se gestaron lentamente y terminaron por socavar su liderazgo:

  • La dificultad para monetizar adecuadamente el servicio y los contenidos (Danah et al., 2007).
  • La falta de un modelo de negocios viable y sostenible (Slee, 2022).
  • La aparición de nuevos competidores más innovadores tecnológicamente (Young, 2022).
  • La incapacidad de reinventarse y evolucionar rápidamente (Boyd & Ellison, 2007).
  • Errores en el manejo y la cultura corporativa luego de ser adquirida por Yahoo! (Slee, 2022).
  • Pérdida de usuarios frente a redes sociales más modernas (Kirkpatrick, 2011).
  • Caída de la credibilidad y prestigio de la marca (Boyd & Ellison, 2007).

En síntesis, la trayectoria de SixDegrees condensa en gran medida el espíritu pionero e innovador pero a la vez el lado oscuro de la temprana era dorada de internet: una mezcla de grandes aciertos y errores que dejaron aprendizajes y legados perdurables, dentro de un ecosistema de cambios vertiginosos (Slee, 2022). Su influencia en el origen de las redes sociales modernas es indiscutible, a pesar de su corta existencia (Boyd & Ellison, 2007).

XII. Evolución e impacto posterior de las redes sociales

Si bien SixDegrees tuvo una vida corta, sentó las bases para la explosión posterior de las redes sociales digitales, las cuales evolucionaron rápidamente en los años siguientes incorporando nuevas características y modelando los comportamientos sociales online (Boyd & Ellison, 2007).

Luego del cierre de SixDegrees, surgieron nuevas plataformas que capitalizaron sus innovaciones. Un caso emblemático fue Friendster en 2002, orientada a conectar grupos de amigos reales, lo cual fue una evolución del concepto original. Pero rápidamente fue superada por MySpace en 2003, con su énfasis en perfiles personalizables y contenidos multimedia (Kirkpatrick, 2011).

Hacia mediados de los años 2000, Facebook terminaría imponiéndose con un concepto más privado y exclusivo para conectar estudiantes universitarios reales (Young, 2022). Su expansión global posterior redefinió por completo al sector (Kirkpatrick, 2011).

Más recientemente, nuevas redes como Instagram, TikTok y Snapchat popularizaron los formatos de imágenes, videos cortos y mensajería efímera (Young, 2022). Asimismo, LinkedIn se consolidó como la red orientada a contactos profesionales y oportunidades laborales (Boyd & Ellison, 2007).

En paralelo, la masificación de los teléfonos inteligentes en la última década llevó a las redes sociales a volverse omnipresentes mediante las aplicaciones móviles (Kirkpatrick, 2011). Hoy en día las grandes redes sociales se han vuelto verdaderos gigantes que conectan a miles de millones de personas (Young, 2022).

El impacto social de este nuevo paradigma ha sido profundo, con efectos positivos como la posibilidad de encontrarse con amigos lejanos e interactuar en comunidades virtuales, pero también inconvenientes serios como la adicción, la sobreexposición personal y nuevos desafíos para la privacidad (Boyd & Ellison, 2007).

En definitiva, la visión precursora de SixDegrees abrió una nueva era de socialización online cuyas complejas implicancias recién estamos comprendiendo cabalmente décadas después (Slee, 2022). Su rol histórico como la primera red social moderna es así hoy incuestionable (Boyd & Ellison, 2007).

XIII. Lecciones y aprendizajes

La experiencia de SixDegrees como pionera de las redes sociales deja también varias lecciones y aprendizajes que pueden servir de guía para emprendedores e innovadores actuales:

  • Tener una visión audaz e ir contra la corriente cuando sea necesario. Weinreich vio el potencial de las redes sociales antes que nadie (Slee, 2022).
  • Apuntar a una necesidad insatisfecha del mercado con un enfoque disruptivo. Conectar a la gente era esa necesidad en los albores de internet (Boyd & Ellison, 2007).
  • Ofrecer un gran producto y ejecución es clave, pero no suficiente. SixDegrees tuvo éxito inicial por su innovadora ejecución (Danah et al., 2007).
  • Hay que adaptarse rápido a los cambios en tecnología, competencia y demandas de los usuarios. SixDegrees no pudo reinventarse a tiempo (Young, 2022).
  • Monetizar la audiencia y generar ingresos recurrentes es crítico desde el inicio para lograr sustentabilidad (Slee, 2022).
  • Equilibrar el crecimiento masivo con la generación de ganancias es un desafío complejo pero necesario (Boyd & Ellison, 2007).
  • Ser adquirido por una gran empresa no siempre funciona si la cultura corporativa no es compatible (Slee, 2022).
  • Problemas internos y externos pueden erosionar rápidamente el posicionamiento logrado (Kirkpatrick, 2011).
  • Legados perdurables se construyen más allá del éxito efímero. El rol histórico de SixDegrees es incuestionable (Boyd & Ellison, 2007).

En resumen, SixDegrees condensa en su corta pero intensa trayectoria los aspectos claves de toda experiencia visionaria exitosa pero también sus riesgos y fragilidad ante un entorno altamente dinámico (Slee, 2022). Una historia tan inspiradora como aleccionadora para nuevas generaciones de innovadores (Boyd & Ellison, 2007).

XIV. Conclusión

En conclusión, a pesar de su corta existencia, SixDegrees fue la primera red social moderna que sentó las bases para este nuevo fenómeno que revolucionaría la interacción social en internet (Boyd & Ellison, 2007).

Elementos que hoy damos por sentado, como los perfiles personales, las listas de amigos y la navegación por redes de contactos, fueron innovaciones pioneras introducidas por primera vez de forma mainstream por SixDegrees (Danah et al., 2007).

Su explosivo crecimiento inicial demostró el fuerte anhelo de la gente por socializar online de nuevas maneras, pero también puso en evidencia los desafíos para monetizar adecuadamente estos nuevos modelos de negocios digitales (Slee, 2022).

Aunque SixDegrees no pudo sostener su liderazgo inicial ante la aparición de competidores más innovadores, su legado e influencia en el origen y evolución temprana de las redes sociales modernas resulta incuestionable (Boyd & Ellison, 2007).

Sentó las bases conceptuales y técnicas sobre las cuales proliferaron las principales redes sociales actuales, convirtiéndose en un servicio legendario que condensa toda una era histórica en la intersección entre la informática y la interacción social mediada por tecnología (Kirkpatrick, 2011).

Referencias

Abbate, J. (2000). Inventing the Internet. MIT Press.

Boyd, D. M., & Ellison, N. B. (2007). Social network sites: Definition, history, and scholarship. Journal of Computer-Mediated Communication, 13(1), 210-230. https://academic.oup.com/jcmc/article/13/1/210/4583062

Danah, M. B., Nicole, B. E., & Alice, M. M. (2009). Social Network Sites: Public, Private, or What?. Knowledge Tree 13. https://kt.ijs.si/data/uploads/public/Jezikovne_tehnologije/JT-2009-1/01-boyd.pdf

Karinthy, F. (1929). Chains. Everything is the Game. http://www.gutenberg.org/files/20100/20100-h/20100-h.htm

Kirkpatrick, D. (2011). The Facebook effect: The inside story of the company that is connecting the world. Simon and Schuster.

Slee, T. (2022). What ended Six Degrees?. https://timslee.substack.com/p/what-ended-six-degrees

Young, K. (2022). The History of Social Networking. https://www.theguardian.com/media-network/media-network-blog/+history-social-networking