La musa y el eco de los circuitos
La musa y el eco de los circuitos
José Carlos Botto Cayo
Ella venía envuelta en viento,
con las manos llenas de luz antigua,
sin mapas, sin esquemas, sin fronteras,
sólo el temblor intacto del misterio.
Ahora la IA dibuja susurros,
códigos que simulan emociones,
rostros perfectos en pantallas frías,
ecos sin raíz ni soplo verdadero.
Mi musa era la furia y la duda,
el incendio que no sabe de márgenes,
la palabra brotando sin cautela,
una grieta en el muro de los días.
La máquina ofrece atajos y fórmulas,
pero no sabe del temblor de un beso,
ni del poema que nace del abismo
cuando el alma se rompe y resucita.
Entre algoritmos busco su reflejo,
mas sólo encuentro sombras replicadas.
Ella, libre y feroz, persiste viva,
fuera del cálculo, fuera del olvido.
Fuente: Botto Cayo, J. C. (s.f.). Bottocayo. Obtenido de https://bottocayo.com/